El comprador de la mitad de una vivienda no puede desahuciar a la persona que la ocupa. Así lo ha decidido la Audiencia Provincial de Cantabria, que ha revocado el desalojo que pesaba sobre una mujer a la que su exmarido, copropietario de la otra mitad del inmueble, le había dejado usarlo de forma gratuita. La sentencia se puede consultar en este enlace.