El río Pisuerga, que nace en el norte de la provincia de Palencia y desemboca en el Duero cerca de Geria, en Valladolid, transita por un territorio marcado por iglesias de arcos redondeados y piedras centenarias. Es la llamada ruta del románico palentino, un viaje que combina los encantos históricos y artísticos medievales, con una riqueza geológica que convierte esta región de Castilla y León en un interesante geoparque.