En Sudáfrica, un país que arrastra graves problemas de pobreza, desigualdad y falta de empleo, los migrantes se llevan la peor parte. Las trabas administrativas y el racismo les impiden conseguir regularizar su situación o pedir una consulta médica
En Sudáfrica, un país que arrastra graves problemas de pobreza, desigualdad y falta de empleo, los migrantes se llevan la peor parte. Las trabas administrativas y el racismo les impiden conseguir regularizar su situación o pedir una consulta médica