“No me preguntes de quien es qué. Cada vez que alguien atribuye una receta a Alain Ducasse o me dice “este plato es tuyo” se equivoca por completo”, me comentaba días pasados Albert Adrià momentos antes de comenzar nuestro almuerzo en la terraza del museo Quai Branly a un tiro de la torre Eiffel, con vistas panorámicas. “Yo he jugado a parecerme a él y él a mí, y hemos logrado un popurrí interesante. A ver qué os parece”.