Menu Close

Will Smith, otro hombre que no deberíamos ser

A quienes con frecuencia nos dedicamos a tratar de explicarles a los más jóvenes la urgencia de desmontar la masculinidad patriarcal nos cuesta mucho trabajo encontrar referencias alternativas que les sirvan de ejemplo. Nos sigue resultando mucho más fácil explicarlo en negativo, es decir, poniendo ejemplos de hombres cuyos comportamientos no deberíamos imitar porque representan toda la toxicidad que emana de una subjetividad construida para dominar y sentirse importante. La ceremonia de los Oscar nos ha ofrecido otro flagrante caso que resume a la perfección todo aquello que los hombres no deberíamos ser. La reacción de Will Smith frente a la broma nada afortunada de Chris Rock encierra todos los elementos que nos permiten identificar un modelo de masculinidad que hoy por hoy sigue siendo el principal obstáculo para construir un mundo sin desigualdad de género y en el que la violencia dejé de estar legitimada. Una violencia que está vinculada a la idea de poder, a la omnipotencia en la que los varones hemos sido socializados y a la asunción de que no hay mejor manera de gestionar los conflictos que recurriendo a la fuerza. De esta manera, la violencia se convierte todavía hoy para muchos en un mecanismo de reafirmación de la virilidad y hasta de restauración del honor supuestamente perdido.

Seguir leyendo.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *