ANDALUCÍA / Sierra de Grazalema (Cádiz)
Miles de alcornoques cubren la escena, hasta el infinito. En la umbría de algunos valles crecen pinsapos, una reliquia de la botánica que desapareció del resto de la faz de la Tierra en el Terciario. Es el parque natural de Grazalema, la sierra de los pueblos blancos, 50.000 hectáreas de bosque autóctono mediterráneo en el extremo sur de la desarrollada e industrializada Europa. Ubrique es la capital de la comarca, aunque Grazalema, la villa que da nombre a la sierra, es la más apropiada para montar la base desde la que explorarla. Sus raíces árabes son visibles en las pulcras calles empedradas, en sus fachadas de mortero de cal y en la uniformidad del manto de teja moruna que cubre sus techumbres. En Benaocaz se conservan las ruinas del antiguo barrio nazarí. La visita al pinsapar está muy regulada; informan de las condiciones de acceso en el centro de visitantes de El Bosque.