Iñaki Urdangarin ha vuelto a abandonar la mañana de este miércoles durante unas horas la cárcel de Brieva, en Ávila, para asistir al centro Hogar Don Orione de Pozuelo de Alarcón, en Madrid, donde la pasada semana comenzó una labor como voluntario ayudando a las personas dependientes de dicho centro a mejorar su movilidad con diferentes ejercicios físicos. A la entrada del centro le esperaban varios periodistas y, aunque el exduque de Palma no ha hecho declaraciones, una vez más ha sido su vestuario lo que más ha llamado la atención.