La lucha contra el cambio climático es mundial. Inspirados por Greta Thunberg, cientos de miles de jóvenes se han movilizado en todos los rincones del globo para exigir un planeta sostenible en el que poder crecer. Piden que se declare la emergencia climática y que la ecología lidere el discurso político. Sus madres, y las madres de los que aún no pueden unirse a las sentadas frente al Congreso, han creado grupos de familiares preocupados con el futuro en más de 17 ciudades españolas. La preocupación también ha bajado a los barrios. En ellos, se ha llevado a cabo una semana de actividades e iniciativas de concienciación medioambiental, coincidiendo con la Cumbre del Clima de la ONU celebrada en Nueva York.