Si existe un futuro para la lectura en español en Estados Unidos, estaba el pasado sábado en algún lugar de la biblioteca Central de Los Ángeles. Cientos de personas, en su mayoría familias latinas, tomaron el emblemático edificio del centro de la ciudad para celebrar la realidad lingüística del sur de California en el llamado Libros Festival, la primera feria de libros bilingüe que celebra una ciudad en la que los latinos son la mitad de la población.