Algunos juristas defienden que todo lo que no está permitido está prohibido. Otros sostienen que todo lo que no está prohibido está permitido. Mientas se ponen de acuerdo, los ciudadanos solo tienen claro una cosa: que la ignorancia de las leyes no exime de su cumplimiento. El problema es que hay tantas y tan variadas que, en ocasiones, no está claro qué se puede y qué no se puede hacer. Para resolver esas dudas, hemos preguntado sobre la legalidad o no de algunas acciones cotidianas.