El concepto de “valores experienciales” fue acuñado por el psiquiatra y filósofo austriaco Víktor Frankl en el clásico El hombre en busca de sentido, una obra que recoge la idea de que “no es la voluntad de poder ni la voluntad de placer, sino la voluntad de sentido la que hace al ser humano, y esa voluntad de sentido va más allá de las circunstancias”. El ser humano tiene una inmensa capacidad de trascender sus dificultades y descubrir una verdad conveniente y encaminada. Y el arte es quizá uno de los vehículos más eficaces. Una vez más lo está demostrando en esta cuarentena, en la que muchos caminos se cierran, pero nacen otras iniciativas al servicio de la creatividad y de la búsqueda de un sentido que nos explique.