Las cámaras fotográficas retrataron con detalle la jornada del pasado 27 de abril, la primera en la que los niños pudieron regresar a las calles de España tras 42 días confinados en sus hogares para frenar la pandemia de coronavirus. Más allá de captar la felicidad de los menores, profesionales de acreditada solvencia y aficionados desde el balcón intentaron comprobar si quienes acababan de recuperar parte de su libertad de movimiento estaban cumpliendo o no las condiciones que exigía el Ministerio de Sanidad. Una misma imagen de Associated Press (AP) —aunque hubo otras similares de otros fotógrafos y agencias— se convirtió en las redes sociales tanto en la prueba que mostraba las aglomeraciones como en el testimonio de que tales aglomeraciones no se habían producido.