Tal y como ocurre con el colchón, la almohada es fundamental para tener un sueño reparador y reposar en una posición natural. Los expertos recomiendan utilizar almohadas más bien bajas y no demasiado blandas que mantenga la cabeza en línea con el cuello. De igual modo, debemos tener en cuenta ciertos aspectos a la hora de elegir las fundas con las que las cubrimos. Elegir, por ejemplo, una funda transpirable es muy útil para mantener el cuello y la cabeza secos y cómodos mientras descansamos.