El coste de las tarjetas revolving —ese peculiar tipo de plástico que se caracteriza por renovar automáticamente el crédito disponible y por tener cuotas de devolución reducidas y tipos de interés muy elevados— bajó el primer semestre. Si en diciembre las revolving de las 13 principales entidades financieras que las comercializan generaban una tasa media anual equivalente (TAE, es decir, el tipo de interés más costes y comisiones) del 25,20%, en junio esta era del 22,86%, lo que equivale a un descenso de más de dos puntos, según el último barómetro de la Asociación de Usuarios Financieros (Asufin). Pese a ello, el porcentaje medio registrado en junio supone 4,17 puntos más que el último tipo de interés medio de las tarjetas de crédito y revolving publicado por el Banco de España, que alcanzó el 18,69%.