Carme Ferrer y Manuel Sanmartín son un matrimonio con una concepción vitivinícola vanguardista y creativa. Fueron pioneros en usar la garnacha blanca para crear vinos de hechura moderna y sugestivos, más allá de los habituales dulces y rancios clásicos. Luego ampliaron su horizonte con el tinto Coma d’en Pou, elaborado con garnacha tinta, cabernet sauvignon y syrah, cultivados al este de Gandesa, en las estribaciones de la sierra de Cavalls. Han continuado con Templari, y la serie En Moviment, con tres propuestas, donde se refleja la mirada sensible de Pili Sanmartín, el relevo generacional.