Existe una habilidad innata en Victoria Yakusha (Dnipro, 1982) para convertir en objeto de deseo todo lo que toca. Arquitecta, diseñadora de interiores, mecenas cultural, autora de una codiciada línea de muebles, decoración y fragancias… Las facetas de esta diseñadora ucraniana son tan inagotables como su forma de conceptualizar el diseño contemporáneo, a través de piezas que se mueven a sus anchas entre el pasado y el presente.