La nueva realidad social que ha traído la pandemia ha afectado a todos los ámbitos de nuestra vida, cambiando la forma en que nos comunicamos, cómo nos relacionamos y, por supuesto, la manera en que enseñamos y aprendemos, ya sea dentro o fuera del aula. Escuelas y universidades regresan a una actividad que aspira a mantener una cierta normalidad, y lo hacen girando hacia un modelo digital que pueda dar respuesta a las cambiantes necesidades de los docentes, los alumnos y sus familias. Un contexto en plena transformación en el que destacan soluciones como Google Classroom, recursos audiovisuales como Zoom o YouTube y numerosas aplicaciones educativas, cuyo uso, a nivel global, creció un 105 % solo durante el pasado mes de marzo.