El boom de los patinetes eléctricos como medio de transporte urbano está generando algunos problemas de convivencia. Los accidentes provocados por estos vehículos se han triplicado en grandes ciudades como Barcelona. Pero, si bien es cierto que la mayoría de los ayuntamientos se han apresurado a aprobar una normativa que regule su uso dentro del municipio, existen aún importantes y numerosas dudas legales sobre los requisitos que deben cumplir sus conductores. Dependiendo de las características del patinete, estos se pueden enfrentar a cuantiosas multas administrativas e, incluso, penas de prisión.