En tiempos en los que cualquier viaje parece una odisea, y cruzar una frontera un sueño inalcanzable, una escapada a Gran Canaria resulta un viaje casi exótico. Incluso si ya hemos estado en otras ocasiones, esta isla se presta a redescubrimientos interesantes. Por ejemplo, vivir tres o cuatro estaciones del año en un solo día, transitando entre la costa y la montaña; descubrir por qué es uno de los grandes destinos internacionales para el surf; contemplar la impresionante espectacularidad de las montañas volcánicas en rincones como Artenara; adentrarnos en los misterios ancestrales de los guanches o probar sabores canarios de siempre con un toque creativo. Y todo en el que, actualmente, es el entorno sanitario más seguro de España.