Desde que Arthur Conan Doyle decidiera prescindir de Sherlock Holmes (sí, ya sabemos que luego no tuvo más remedio que rescatarlo de la muerte ante la presión de los fans), la historia de los autores del género con los héroes que les han hecho célebres y, a veces, ricos es complicada. No parece que sea el caso de Jo Nesbø (Oslo, 60 años), el padre de Harry Hole, uno de los grandes personajes de la novela negra contemporánea, que sigue paseando sus sufrimientos por la convulsa Noruega y que, a pesar de sus adicciones, heridas, misiones suicidas y otras barbaridades ha llegado vivo a la duodécima entrega de la serie (Chuchillo, Roja y Negra).