Elena tiene 12 años y nació con diversidad funcional en su brazo derecho. Lleva una vida normal y cuenta con una prótesis de bajo coste que ella misma ha diseñado junto con los profesionales. Ahora, la extensión de su brazo cuenta con un conjunto de gadgets intercambiables que le permiten realizar diversas actividades como pasar las páginas de un libro, cepillarse los dientes o sujetar una raqueta para jugar.