Fabiano Caruana y Maxime Vachier-Lagrave han ilustrado hoy por qué el ajedrez es tan difícil que ni siquiera las computadoras más potentes han alcanzado la perfección. El estadounidense ganó un combate agotador de seis horas en la reanudación del Torneo de Candidatos en Yekaterimburgo (Rusia) un año después de la suspensión por la pandemia, y se acerca al ruso Ian Niepómniachi, líder a falta de seis rondas para decidir quién retará al noruego Magnus Carlsen en noviembre.