Mientras la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE) siga sin variaciones, el índice al que se vinculan los tipos de interés de las hipotecas continuará estable en niveles ínfimos. Esta es la previsión de los expertos para el euríbor, cuya media mensual —a falta del dato del viernes— cierra abril en -0,483%, apenas 0,4 puntos básicos por encima de la registrada el mes anterior y muy cerca del -0,505% al que cayó en enero, su mínimo histórico. Un euríbor por los suelos no solo afecta directamente a los tipos de interés variables, sino que empuja también a la baja el coste de las hipotecas fijas, por las que están apostando fuerte tanto las entidades como sus clientes.