Dimitri Zilberstein (Ucrania, 1979) es uno de los millones de niños soviéticos cuyo amor por el ajedrez fue inculcado por su familia y primeros maestros cuando era una pasión gigantesca en el país más grande del mundo. Aunque todavía era un niño cuando emigró a California, sus fundamentos técnicos ya eran sólidos, y de su gran talento natural quedarán muy pocas dudas tras disfrutar de la partida de este vídeo.