Ragnar Axelsson ha fotografiado el Ártico y su entorno durante cuatro décadas. Su obra es un homenaje a la resistencia de sus pobladores y al esplendor de un territorio cada vez más afectado por el cambio climático.
Ragnar Axelsson ha fotografiado el Ártico y su entorno durante cuatro décadas. Su obra es un homenaje a la resistencia de sus pobladores y al esplendor de un territorio cada vez más afectado por el cambio climático.