Creo que muchas personas saben que en España, desde el año 2012, las personas extranjeras no pueden acceder a la sanidad pública en las mismas condiciones que las españolas. Lo que no sé es si todo el mundo se ha parado alguna vez a pensar qué supone esta restricción en la vida de las mujeres migrantes que, por diferentes circunstancias de su vida, necesitan abortar.