El escándalo de Ucrania ya ha provocado la primera dimisión. El diplomático Kurt Volker ha renunciado a su puesto de enviado especial para el país al verse envuelto en el caso de las maniobras de Donald Trump para lograr que la justicia ucrania investigase al exvicepresidente demócrata Joe Biden, según informaron fuentes anónimas de la Administración a distintos medios estadounidenses. Volker es uno de los funcionarios del Departamento de Estado que los demócratas pedirán que declare por el caso, dentro de la investigación previa al impeachment o destitución que el Congreso acaba de poner en marcha.