Que un equipo anuncie el fichaje de una estrella internacional puede ser un revulsivo para el equipo, una alegría para la afición, un aliciente para la prensa, pero un trabajo extra para una parte esencial del club: el departamento jurídico. “Hay que estar preparados y ser muy eficientes cuando el director deportivo quiere fichar a alguien de Nigeria, por ejemplo, saber gestionar con celeridad permisos de residencia, visados del Consejo Superior de Deportes (CSD), documentos de la embajada, tarjeta de extranjero…”, comenta el director general del CD Leganés, Martín Ortega. Ese despacho, además, es el mismo que debe reclamar el pago de los derechos de formación de jugadores de su cantera que terminan en otros clubes profesionales, gestionar patrocinios, buscar nuevos ingresos a través de las redes sociales o los videojuegos, encargarse de la correcta contratación de personal… Y, con la competición en marcha, también de recurrir las tarjetas que hayan podido ver sus jugadores.