Nunca es demasiado tarde para perseguir un sueño. Lo sabe bien Giuseppe Paternò, siciliano de 96 años que acaba de graduarse, con excelentes notas, en Filosofía e Historia en la Universidad de Palermo, como el estudiante más longevo del país. Ha superado todo tipo de pruebas, no solo académicas, para llegar aquí: la pobreza extrema en la infancia, la Gran Depresión, el fascismo, dos duras posguerras, una guerra mundial y más recientemente, la pandemia de coronavirus.