ES DISEÑADORA de una marca célebre por sus exquisitos productos de piel; artífice de iconos del diseño contemporáneo, como el bolso Kelly, en cuya elaboración se invierten 24 horas de trabajo manual. Pero cuando en octubre termina su último desfile y se acerca a saludar a algunos invitados, lo que luce no es una impresionante pieza en piel de cocodrilo, sino una riñonera de tela. Vestida de negro, sin maquillar y con su melena pelirroja suelta, Nadège Vanhee-Cybulski resulta pragmática y poética a partes iguales. E indiscutiblemente francesa; como las colecciones de mujer que lleva creando para Hermès desde que hace seis años fuese nombrada directora creativa del prêt-à-porter femenino. Con la maison comparte, además, un valor definitorio: la discreción. Lejos de los diseñadores estrella, la mujer que capitanea una de las marcas más prestigiosas del mundo es, a sus 42 años, casi una desconocida fuera del sector del lujo. Y eso que su currículo está en las antípodas del perfil bajo.