El candidato republicano no alcanzará la mayoría simple -más votos a favor que en contra- necesaria para ser investido en segunda vuelta, a la que se somete tras fracasar la primera votación el viernes, cuando necesitaba mayoría absoluta
El candidato republicano no alcanzará la mayoría simple -más votos a favor que en contra- necesaria para ser investido en segunda vuelta, a la que se somete tras fracasar la primera votación el viernes, cuando necesitaba mayoría absoluta