“Siempre quise dedicarme a elaborar quesos de autor. La lectura me apasiona y montar una editorial era mi sueño. Quería ser mi propio jefe”. ¿Quién no ha visto alguna vez en la televisión testimonios como estos y ha fantaseado con la idea? Pues bien, muchos de ellos, posiblemente, hayan capitalizado su prestación de desempleo para poder lograrlo.